Desde la antigüedad el ser humano ha sido capaz de transformar la materia en materiales, bien obteniéndolos directamente de la materia natural, mediante su transformación, creando materiales sintéticos e incluso reciclando los ya utilizados.
Algunos de los cambios y adaptaciones que ha conseguido la humanidad ha sido gracias al uso de materiales como el papel que supusieron en su momento grandes revoluciones. Así el acero ha sido clave para la construcción, el coltán para el desarrollo de dispositivos electrónicos, las cerámicas en las prótesis de ortopedia, los composites en la ingeniería naval o los plásticos obtenidos por polimerización en infinidad de aplicaciones.
Hasta el punto de que ahora son muchos los campos que para conseguir progresar necesitan del diseño de nuevos materiales, tales como la aeronáutica, la medicina, la electrónica, la comunicación y hasta el deporte entre muchos otros.
Por eso se están elaborando nuevos materiales como:
- materiales cerámicos avanzados que potencian sus propiedades y disminuyen su fragilidad.
- polímeros biodegradables y con mayor resistencia como las fibras de alto módulo.
- aleaciones metálicas que resistan condiciones extremas más duras.
- biomateriales cuyo diseño permitan aplicaciones más adaptadas para prótesis.
- superconductores con una gran conductividad eléctrica y térmica.
- materiales inteligentes que derivan del uso de la nanotecnología.
Partimos de la base de que es practicamente imposible predecir con exactitud qué tecnologías futuras se van a desarrollar, entre otras cosas porque no somos capaces de dislumbrar qué cambios sociales van a ocurrir a corto y medio plazo y por tanto, qué necesidades se deberán cubrir. Pero... ¿serías capaz de imaginar qué características deberán tener los materiales del futuro? o mejor aún ¿qué características te gustaría que tuvieran los materiales que usaras dentro de unos años?.
Busca información sobre los últimos avances en la ciencia de los materiales (ayúdate de los enlaces de este post) y con esa base aventúrate a imaginar qué aplicaciones futuras podrían tener o te gustaría que tuvieran.